Interpretado por el actor inglés Benedict Cumberbatch, es el personaje principal de la serie, que da nombre al título.
Como en las versiones originales escritas por sir Arthur Conan Doyle, Sherlock Holmes es un detective asesor, que es capaz de deducir cualquier tipo de información observando los detalles más insignificantes y que normalmente pasarían desapercibidos. También se conoce la ciudad de Londres como la palma de su mano, y tiene la Red de vagabundos (mencionado también en los libros), a quienes utiliza como sus "ojos y orejas" por todas las calles de la capital inglesa.
Trabaja resolviendo los casos que le proponen sus clientes o los policías de Scotland Yard.
Como el Holmes original, Sherlock siempre parece darle más importancia al crimen que a la víctima. Tampoco es una persona sociable, y él mismo confiesa que no tiene amigos. Suele ridiculizar y ser grosero con otras personas, especialmente con agentes como Anderson y Donovan, que se mofan de él por ser excéntrico.
A medida que avanzan los episodios, podemos ver como Sherlock evoluciona en relación a su compañero de piso y colega John Watson, cambiando su actitud inicial de superioridad para demostrar que en realidad se preocupa de su amigo.
En esta versión moderna del clásico, Sherlock utiliza todo tipo de tecnología que encontramos en nuestro día a día (teléfono móvil, internet, su blog...), y utiliza parches de nicotina ya que en la actual Londres es difícil mantener el hábito de fumador (en los libros, Holmes siempre va acompañado de su famosa pipa de fumar) y, él mismo alega que fumar le ayuda a pensar. También toca el violín y en ocasiones compone música por la misma razón.
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